PROPONEN DECLARAR CIUDADANO ILUSTRE A PIONERO DE BIBLIOTECAS CALLEJERAS Un revolucionario cultural Su encomiable labor fue un gran éxito en varias ciudades del país. En las plazas ya no se aglomeraban solo para jugar o tomar el tradicional tereré. Sino...
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PROPONEN DECLARAR CIUDADANO ILUSTRE A PIONERO DE BIBLIOTECAS CALLEJERAS
Un revolucionario cultural
Su encomiable labor fue un gran éxito en varias ciudades del país. En las plazas ya no se aglomeraban solo para jugar o tomar el tradicional tereré. Sino también para leer. Las bibliotecas callejeras se convirtieron en parte de muchos espacios recreativos.
El escritor Aníbal Barreto dejó un legado imborrable para el revolucionario mundo literario. Por eso de manera a retribuir con su aporte a la cultura y la lectura la Junta municipal de Asunción quiere declararle ciudado ilustre.
Internado pero de excelente humor, Anibal espera su segunda operación (de una serie de tres previstas) a raiz de una hemorragia cerebral que le afectó dos meses atras.
Estando internado le sorprende la noticia de esta iniciativa para que sea declarado ciudadano ilustre por la comuna asuncena. Haber tenido proyección con las bibliotecas callejeras tuvo su éxito. Una idea que trajo de
Clifton, un pueblo de Virginia en Estados Unidos. Así Barreto se convirtió en embajador y pionero de bibliotecas callejeras en Paraguay.
Las bibliotecas callejeras consisten en el intercambio de libros. Son casetas instaladas en calles y plazas donde cualquiera puede tomar y colocar otro. Inicialmente empezó en 2016 en Itacurubí de la Cordillera cuando habilitaron un espacio de lectura en el balneario Itakoty con un mueble lleno de libros alrededor de bancos y mesitas.
Ese mismo año en Itauguá crearon una biblioteca al aire libre con cajones de frutas pintados, lugar para los libros que recibían en donación.
Pero en octubre de 2018 en Lambaré fue la cruzada más exitosa y de ahí disparó a distintas ciudades. Hoy existen 86 bibliotecas en callejeras en todo el país. La visión del escritor Aníbal Barreto de instalar bibliotecas callejeras fue un acto de rebeldía cultural por el famoso mito urbano de que el "paraguayo no quiere leer".
Aníbal derribó esos paradigmas. Por eso merecidamente tendrá el reconocimiento por parte de la Junta municipal de Asunción.
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