PANDEMIA DE NEGOCIOS | TELEDIEZ

TRAS CADENA DE ESCÁNDALOS VAN A MONITOREAR COMPRAS

PANDEMIA DE NEGOCIOS

La ola de “negocios de pandemia” llevó al presidente Mario Abdo a crear una comisión especial para “controlar” compras con dinero del Estado durante la pandemia. Arnaldo Giuzziu, ministro de la SENAD estará a cargo de monitorear las compras de ahora en más.

Y como no crear una comisión que “controle” después de los escándalos en licitaciones con indicios de sobrefacturación en tiempos de pandemia. Inició con los “tapabocas de oro”, orquestado por Edgar Melgarejo ex titular de la DINAC (aunque según fuentes “sigue manejando todo” en la DINAC). La denuncia fue que adquirió 4.000 tapabocas de la empresa Proyecto Global S.A.  a 29.990 guaraníes. Esta misma empresa vendía a farmacias los mismos tapabocas a 2.700 guaraníes. Mlegarejo actualmente está imputado.

La muy cuestionada Patricia Samudio, ex presidenta de Petropar fue la siguiente en el ojo de la tormenta. La indignación generalizada fue con la compra de tapabocas por unos 260.000.000 de guaraníes (a un precio absolutamente superior al del mercado), termómetros a 1.700.000 guaraníes cada uno y el agua tónica “inmunizante” por unos 25 millones de guaraníes. Cuando fue consultada sobre los precios exorbitantes, dijo que se debe a la oferta y demanda.

Y la gota que colmó el vaso fue el escándalo de las “camas de oro” hospitalarias en el Ministerio de Salud. La firma proveedora Insumos Médicos SA debía entregar unas 50 camas hospitalarias que ofertó cada una a 4.250.000 guaraníes, totalizando la suma de 212.500.000 guaraníes. Pero un documento de despacho de importación reveló en el detalle de importación figuraban 400 camas hospitalarias por un total de 268.228.731 guaraníes, lo que equivale a un precio promedio de 670.571 guaraníes por cada cama. En síntesis el ministerio pagó 3.579.429 guaraníes más caro cada cama.

Este último escándalo hizo “renunciar por razones personales” del ministerio de Salud a Pablo Lezcano de la Unicidad de Contrataciones, Alcides Velázquez de Administración y Finanzas, y a Lourdes Rivaldi de Vigilancia Sanitaria.

Aparentemente las intenciones son buenas con la creación de la “Comisión Especial de Supervisión y Control de Compras Covid-19”. Pero quizás de nada sirva si no se acaba la red de protección con vínculos familiares, políticos y económicos cuando hay indicios de corrupción

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